Cinthya Gómez | @KioscoInfo | 03 de agosto de 2017
El toc toc de los tacones cimbró la duela. Pero no cualquier duela. Sino la del escenario del Teatro Degollado de la Ciudad de Guadalajara, lugar, donde el Ballet Xalisco de Capilla de Guadalupe se presentó para actuar a nombre de Tepatitlán, como parte del programa del FESTA 2017.
Sonó el mariachi. El sentimiento jalisciense que infundieron las cuerdas de los guitarrones y violines al rasgarse y el bufido de las trompetas al sonar, prendieron a quienes presenciaban las actividades del Festival de las Artes de Jalisco 2017 en el Degollado.
Los Capillenses se lucieron. Desplegaron un repertorio de pasos de baile entre polcas, huapangos y sones de mariachi acompañados de trajes típicos pertenecientes a cada estado de su selección: Veracruz, Nuevo León y Jalisco.
Primero, el Ballet capillense interpretó, a punta de taconazos, polcas neolensas y sones jarochos. Pero fueron los pasos de Jalisco los que pusieron la piel chinita a los asistentes.
El floreo de las faldas, el azote de los sombreros en el piso y el floreo de soga de los capillenses cautivó al público del Degollado, hasta hacerlos reventar en aplausos.
Las suertes charras con la soga corrieron a cargo del único joven tepatitlense del conjunto, quien entre saltos, movimientos de muñeca, logró que la cuerda se alzara al aire como un ente animado.
FESTA alteña
La segunda fase de la presentación de la noche estuvo a cargo del Ballet Folklórico Atoyanalco de San miguel el Alto, Jalisco, quienes interpretaron, a través de la danza, la historia del movimiento religioso Cristero que se gestó particularmente en esta región del estado.
El conjunto San Miguelense, en especial mezcló suertes de ballet clásico, prehispánico y folklórico para dar a entender la multiculturalidad de la región y de la época en la que sucedió el conflicto religioso.