Por: Elba Gómez Orozco
Soy la loca
la que tira puertas
traspasa escudos
rompe ídolos
calcina vanidades
Soy la loca
la madre loca
una de tantas locas
La incómoda, la levantisca, la incendiaria,
la que al impulso de sus arrebatos se tornó visible
La loca que busca a su hija
en los otros rostros
en las otras sombras
en las otras desaparecidas
en las otras muertas
Una de miles,
con su cansancio, con sus desvaríos, con su impotencia
la que indaga en la nada y no encuentra en el todo
La de las preguntas
la de los silencios
la del incordio de otros
la de la iniquidad de todos
Soy la madre loca que pierde el decoro ante el atropello,
la no escuchada, la reprimida, la malquerida
La que pide justicia y recibe gases
y que en su locura recita consignas
busca aliados y resiste granaderos
perfuma vallas y hereda toletes
En la batalla, soy la madre de todas,
de todas las desaparecidas
de todas las olvidadas
de todas las muertas
De ellas
las que soñaron con vidas perfectas
con hijos y estrías
hogar y cansancio
marido y hastío
De las otras ellas
de las que en la lucha forjaron su temple
de las que sin ser madres son madres de todas
hermanas de todas, hijas de todas.
Sí, soy la madre,
de las que lloraron
de las que rogaron
de las que rezaron
de las que volvieron invisibles
De todas las Susanas
de todas las Marcelas
de todas las Gabrielas
de todas las Lorenas
Y en la cordura de mi soledad, sólo soy una mujer
La madre de otra mujer
la que ya no está por ser mujer
la que está desaparecida por ser mujer
¡Y a la que no encuentro por ser mujer!