Cinthya Gómez | @escriboenlaluna
1 de agosto de 2016.- Tablaroca, basura, ladrillos, costales con tierra, grava y mezcla, concreto, plásticos, antiguos exhibidores publicitarios, textiles, comida en descomposición y todo tipo de materia orgánica, son algunas de las cosas que se pueden encontrar a los lados del inconcluso circuito interior desde el río Tepatitlán hasta su cruce con el Bulevar Acatíc.
Se trata de cerca de 230 metros en los que a ambos lados de la avenida se levantan pequeños montones de tierra y plantas.
Esa zona de paso entre el Parque Bicentenario y el residencial Guadalupe no ha perdido su encanto, pues desde que era sólo una brecha ya se destinaba para dejar escombros y basura.
Ahora que es ahora una vialidad en concreto hidráulico y que comunica transversalemente buena parte de la ciudad, ese tramo sigue siendo aprovechado por algunas personas, incluidas algunas empresas, para abandonar sus escombros y basura en general, sin importar la ahora del día.
Hace unos meses este medio constató que los escombros guardaban un espacio considerable respecto a la nueva vialidad, sin embargo como constató la reportera de este medio, hoy en día los cartones y la basura ya invaden la carpeta asfáltica.
Aunque los escombros se ubican en su mayoría en terrenos privados, el puente que enlazaba los primeros trazos de esta vialidad, también es víctima de este deterioro, pues ya que no se han construido los carriles laterales del circuito, este también sirve como depósito de basura. Sin embargo no se trata de cualquier problema ya que estos residuos se ubican exactamente a los costados del río Tepatitlán.
Respecto al tema, los funcionarios del gobierno municipal se desentendieron del tema, ya que la dependencia de Aseo Público de esta localidad rehusó a hablar del tema, argumentando que por tratarse de escombros tirados en terrenos privados, el problema es competencia de Obras Públicas.