*Francisco Jiménez Reynoso | @jimenezabogado | 24 de abril de 2017
A lo largo de la historia de la humanidad, el hombre y mujer han adoptado diversos mecanismos político -sociales para lograr vivir en sociedad. A continuación, mencionaremos algunos de los más destacados, y trataremos de ubicar el estatus de México, intentando encuadrarlo en alguno de ellos, o de plano tendremos que inventar un concepto como el de: narcocracia, que explicaremos al final de la columna.
Etimológicamente la palabra democracia proviene del griego “δημοκρατία” (democratía), y se compone de los términos “δῆμος” (démos), que puede traducirse como ‘pueblo’, y “κράτος” (krátos), que significa ‘poder’.
En teoría la democracia es una forma de gobierno del Estado donde el poder es ejercido por el pueblo, mediante mecanismos legítimos de participación, en la toma de decisiones políticas.
Otro concepto es la Aristocracia: En el mundo clásico, fue una forma de gobierno según la cual el poder político es ejercido por los mejores. En ciertas épocas, ejercicio del poder político por una clase privilegiada. Clase noble de una nación, de una provincia, de carácter hereditario. Grupo de individuos que sobresalen entre los de su mismo ámbito por alguna circunstancia.
También podemos mencionar la Plutocracia: situación en la que los ricos ejercen su preponderancia en el gobierno del Estado. Conjunto de ciudadanos adinerados que ejercen su influencia en el gobierno del Estado.
La monarquía es una forma de gobierno en la que la jefatura del Estado reside en una persona, un rey o una reina, cargo habitualmente vitalicio al que se accede por derecho y de forma hereditaria.
Con base al estudio de estos conceptos, he tratado de encuadrar el estatus de México, y en teoría se nos ha inculcado que vivimos en una “democracia”, pero no creo que sea el caso en términos prácticos y objetivos.
Lejos estamos de que el pueblo tenga el poder. Amén de los fraudes electorales que hemos padecido sistemáticamente en nuestro país, vulnerando así, sistemáticamente la voluntad del pueblo.
Además se ha reventado el hilo tan delgado que dividía (al menos en apariencia) al gobierno de la delincuencia (hoy llamada acertadamente organizada). Pues el caso del Director en su momento de Seguridad Pública del estado de Veracruz, pertenecía a un cartel delictivo y por esos motivos se encuentra detenido.
Otro caso emblemático es el caso del Fiscal General en funciones del vecino estado de Nayarit, quien fue detenido en Estados Unidos, San Diego. Y esta siendo procesado por pertenecer a un cartel criminal de los más poderosos de México y el mundo.
Lo anterior, me lleva a crear un concepto nuevo que sería la: “Narcocracia”, esto es: el poder del Narco. Que cada vez gana más terreno en México. Ante la debilidad gubernamental.
En este momento, son 17 ex gobernadores en México que por despacharse con la cuchara grande tienen problemas con la justicia. Algunos ya están presos, otros siguen prófugos, otros amparados. Algunos son buscados por la Interpol por los delitos de: desvío de recursos, lavado de dinero, delincuencia organizada o narcotráfico, por mencionar algunos delitos en los que incurren los gobernadores contemporáneos.
Lo interesante es el común denominador, las detenciones se han dado en el extranjero. Por ejemplo: Moreira en España, Yarrington en Italia, Duarte en Guatemala. Lo que quiere decir, que si hubiesen permanecido en México, anduvieran placeándose sin ningún problema.
Una cosa que me llama la atención es la sonrisa de Duarte…
Qué significa, me pregunto. Será sólo la sonrisa de un cínico, o quizás esta mandando un mensaje a sus cómplices. O lo protegen, o se las verán difícil junto con el. Dudo mucho que la corrupción a esos niveles la pueda hacer una sola persona.
Habrá que cuidar de este personaje, ya que si lo traen a México correría peligro su vida por la información que podría poseer y quizás pruebas de otros personajes del poder en funciones.