Cinthya Gómez | @escriboenlaluna
31 de agosto de 2016.- Existe un regla no escrita entre los mandatarios internacionales: Los presidentes sólo reciben a presidentes. Así que el titular del ejecutivo mexicano, Enrique Peña Nieto rompió este principio al recibir en Los Pinos a Donald Trump, candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos, señaló a Kiosco Informativo el profesor Pablo Barragán, adscrito al Departamento de Ciencias Sociales y de la Cultura del Centro Universitario de Los Altos.
“En primer lugar hay un principio que dice que sólo los presidentes atienden a los presidentes. Peña Nieto ha roto con una regla de la política internacional, porque está atendiendo a un candidato (…) Si bien es cierto que la excepción confirma la regla, Trump no es cualquier candidato. Es uno muy polémico, sobre todo para México. En ese sentido, considero que la apuesta del presidente, y se ha visto que los comentarios sobre el encuentro, que han hecho los politólogos y periodistas en redes sociales, han sido negativos».
Y es que según el académico, la riesgosa apuesta del ejecutivo por la visita de Trump a México, sólo debió de tener una misión, matizar su enfoque hacia México y modificar su postura migratoria, de lo contrario, esta tendrá resultados perjudiciales para la imagen ya de por si dañada de Peña Nieto.
“El recibirlo en Los Pinos, la residencia del Ejecutivo, todavía va más allá. Si se hubiera reunido en cualquier lugar, fuera diferente, aunque la envestidura presidencial tampoco hubiera quedado bien. En este, la apuesta es riesgosa. Considero que no le va a funcionar, porque Trump no va a cambiar su postura y visión sobre los mexicanos, en su próxima reunión en Arizona, cuando anuncie su postura migratoria”.
La visita a suelo mexicano del candidato republicano no es cualquier visita, ya que desde que anunció su candidatura por la carrera presidencial, su discurso siempre se ha enfocado a denostar a los mexicanos.
“La gran mayoría de todos los mexicanos, nos sentimos agredidos, vulnerados y retados por el candidato republicano. Por eso consideramos que fue una decisión polémica del presidente (por lo que) si logra que con el discurso cambie, sería un triunfo, pero lo dudo, mucho. Ha sido un año continuo de señalamientos, y ataques a los mexicanos, pues no creo que con esto se vaya a cambiar”.
Peña quiso limpiar su imagen rumbo al Cuarto Informe
Según el académico de la Universidad de Guadalajara, el mandatario mexicano quiso, de alguna manera, llegar bien a su Cuarto Informe de Gobierno invitando a la Residencia Oficial de Los Pinos a Donald Trump, proyectándose como un político preocupado por defender los intereses de su pueblo, pero la forma no fue la ideal.
“De alguna manera quería dar nota, lo malo es que la nota la dio muy mala. Hay que ponerle una tacha a sus asesores. Y es que si el presidente no logra cambiar el discurso de Trump, le va a ir muy mal en las próximas semanas, porque a parte de ser un agravio, es un desacierto total de su política, está bien que diga que el tiene que hacer lo necesario para defender a los mexicanos, pero primero rompió con la regla”.
Además, Barragán insistió en que no había necesidad de traer a México al polémico personaje.
“El ingrediente adicional, es que, según las encuestas, la que va a ganar es Hillary Clinton, así que qué necesidad de entrevistarse con el candidato que va en segundo lugar, y que no tiene segura la presidencia. No tiene lógica”.
Libre Comercio, el tema más importante
En la visita realizada por el multimillonario candidato a Los Pinos tocó tres temas que son importantes en la relación México – Estados Unidos: Drogas, Migración y el muro, que el candidato pretende construir en la frontera sur con México.
Para el profesor de las carreras de Abogado de la Universidad de Guadalajara, el tema más importante que debió haber promovido Peña Nieto es el de los Tratados de Libre Comercio, pues de estos depende la economía de ambos países.
“El candidato republicano ha señalado que el libre comercio ha afectado a sus trabajadores y que en todo caso, si el llegaba a la presidencia lo iba a modificar o eliminar, para bien de Estados Unidos. Es un tema espinoso pero obligado, es el que nos une a ambos países”, comentó el académico.