Cinthya Gómez | @escriboenlaluna
13 de mayo de 2016.- Daniela Elizabeth Muñiz Yerenas es una niña de 16 años, que estudia el tercer grado de secundaria en la Secundaria Técnica 31, que ayuda a sus papás a vender comida y postres por las tardes; que en sus ratos libres toca el violín y que, desde este 11 de mayo, fue elegida para ser diputada en el Parlamento Juvenil del Congreso de Jalisco.
Daniela apenas conoce Tepatitlán. Hace poco su familia se mudó aquí procedente de Guadalajara. Mientras vivió en “la Perla Tapatía”, sede de los poderes del Estado, ella nunca tuvo la oportunidad de conocer el Congreso. Lo oyó nombrar un par de ocasiones, pero nunca tuvo la oportunidad de pasar por ahí.
Fue en una clase de Formación Cívica y Ética que se enteró habría una convocatoria para participar en el Parlamento Juvenil y ser diputada por un día.
“La maestra nos dijo que se trataba de una convocatoria bien padre, en la que podíamos participar a pesar de que no podíamos votar. A mi me pareció bien porque en la escuela hacen falta muchas cosas. Entonces yo pregunté cuando podía comenzar a participar”, .
Cuando sus maestros dieron a conocer la convocatoria completa, ella fue la primera en levantar la mano. El haber decidido concursar para ser parte de una actividad política legislativa y tener la oportunidad de pedir algo para su escuela, fue lo que la llevó a destacar entre sus compañeros.
“El maestro nos dijo que hiciéramos un guión y que anotáramos todo lo que quisiéramos expresar y lo hiciéramos en tres minutos. Estuvimos practicando durante tres semanas. Durante ese tiempo nos fueron seleccionando. En unos honores a la bandera nos hicieron declamar nuestro tema. Y al día siguiente supimos que habían votado por uno de nosotros”.
Próxima a entrar a la preparatoria, la joven de 16 años fue electa como la única representante del distrito tres para integrar el Parlamento Juvenil convocado para el próximo 23 de mayo.
Entre el violín y las ganas de mejorar su escuela
A Daniela le gustan las bellas artes, en un futuro le gustaría ser violinista profesional o cantante de ópera. Pero esta incursión en el parlamento juvenil le ha despertado un interés en la política y la democracia, y en un futuro, dice le gustaría ser una diputada hecha y derecha, de las que si velan por las necesidades de la gente.
Como diputada infantil, Daniela exhibirá iniciativas de mejora para su escuela y otras secundarias técnicas de la región y dará voz a las necesidades de sus compañeros.
“Ya sea para mejorar las canchas. Tenemos algunos salones que son desechables, fueron hechos para diez años y ya tienen tres décadas usándose. Necesitan cambiarse. Necesitamos laboratorios, materiales para ciencias, pizarrones electrónicos, psicólogos”, dijo confiada, de que algo logrará en ese ejercicio lúdico en el Legislativo jalisciense.
Su más grande sueño, un auditorio para la ETA 31. Cree que los niños necesitan un lugar para expresarse en su propia escuela, un lugar para pintar, bailar, o tocar la guitarra, en su caso, para tocar el violín.
Una oportunidad para la ETA
El profesor Gregorio Yañez, director de la Escuela Secundaria Técnica 31 de Tepatitlán, cree que de esta oportunidad se pueden obtener beneficios para mejorar las condiciones del plantel de educación básica.
“Es un orgullo para nosotros que alguien del distrito tres haya quedado en Tepatitlán y el orgullo más grande es que vaya a representar a Jalisco en el Parlamento Juvenil y sea de nuestra escuela. Esto nos trae un impulso”.
“Ella trae una iniciativa de educación, para mejorar los problemas que hay en la escuela, ojalá logre gestionar apoyos de insumos para la secundaria (…) hablará también de varios problemas, como la drogadicción, la contaminación, todo lo concerniente a la educación; Todo esos apoyos los va a discutir en el Congreso”, señaló el director.