Staff Kiosco Informativo | @KioscoInfo | 06 de Noviembre de 2019
Es en casas habitación y no en centros nocturnos dónde más se viola la recién Instituida Ley Anti ruido en Tepatitlán, destacó para Kiosco Informativo, Javier Aguirre Nuño, coordinador de Inspección y Reglamentos de la localidad.
Aguirre Nuño enfatizó que, sí bien han infraccionado a negocios, son las personas quienes más bien han incidido en desentenderse del reglamento, pues indica, que las fiestas familiares en los hogares han tomado otro nivel.
«¿Quién ha insidido más en el sonido? La casa habitación, no los negocios. Uno que otro negocio si lo hemos amonestado. Pero la gente en Tepatitlán está tomando una nueva forma de realizar fiestas en su casa, contratan un conjunto norteño. En esos casos nos llegan hasta cinco reportes de los vecinos. Llegamos y ahí está la banda al interior de la casa. Realizamos la amonestación correspondiente. Recibimos la negativa. Es un conflicto grande porque por lo regular la gente que tiene fiesta en su casa ya está alcoholizada». En estos casos, destaca el funcionario, se hace necesaria la intervención de la Policía Municipal.
En uno de estos eventos, dada la respuesta violenta de los vecinos en la colonia de Los Arroyos, se realizaron seis arrestos.
En cambio, asegura el funcionario, esta nueva norma ha sido tomada de buena manera por los negocios en el municipio, aunque si se han amonestado a los bares más famosos de la cabecera y uno en Capilla de Guadalupe.
«Ha sido gradual su aceptación. Al principio si se ponían renuentes a bajarle al sonido. Hemos logrado que tomen conciencia y bajen el sonido; y que implemente medidas para la modificación de sus instalaciones para que el sonido no salga de sus instalaciones, tengan control sobre el y no afectar a los vecinos». Entre los cambios realizados por estos negocios está la instalación de ventanas de aire, de cristal reforzado, plafones y hasta con cartón de huevo.
Señala que también en las viviendas, la primera amonestación basta para que los ruidosos «le bajen» al volumen.
Sin embargo, a pesar de que la norma estaba ya votada y socializada desde 2018, los bares sí han solicitado prórrogas en el nivel tolerable, mientras realizan dichas modificaciones a su infraestructura.