Juan Eduardo López Morales | @EduardoLopezM | 25 de octubre del 2018
Desde hace unas semanas hasta hoy, yo no sé usted estimado lector, pero siento como si nos encontráramos en un remolino de información, en donde hay muchos temas prioritarios, y en donde las diferentes cada quien jala hacia sus propios intereses.
En el ámbito público aparece de todo, desde las declaraciones del nuevo presidente electo, la presentación del nuevo gabinete de Enrique Alfaro, los migrantes, los cambios de las administraciones municipales, las primeras sesiones y lo que ocurre en las cámaras de diputados y/o senado, como el ejemplo de las particularidades del senador “Sergio Mayer”.
“El impacto de un hecho, ¿Queda disminuido cuando la noticia recibe una presentación menos destacada?” Según el investigador Maxwell McCombs.
Maxwell, es un ejemplo relevante en la actualidad, la agenda mediática de los últimos días se volcó a las imágenes, videos e información en relación con los migrantes, los principales medios de comunicación, primordialmente en la televisión y/o digitales que utilizan videos, priorizaron imágenes y videos que impactaban al televidente y al espectador dejando de lado asuntos más relevantes para informar.
En la realidad del día a día hay mucha desinformación en la sociedad, por todas partes existe una apatía por informase y querer conocer las diferentes noticias del día. Estamos ante una crisis de saber cuáles son nuestras prioridades y dentro de ellas, saber cuál sería la agenda que tenemos que darle prioridad.
En las últimas semanas se ha dado el fenómeno de muchos temas, muchos ruidos y pocas nueces. Es evidente que mientras no establezcamos como ciudadanos, lo que es primordial para todos; nuestros políticos se aprovecharan de la nula rendición de cuentas, de que “hago como que trabajo”, pero que bueno que muchos estén ocupados y entretenidos al paso de un posible huracán en el pacífico.
Más vale tener a los ciudadanos ocupados y entretenidos en otras situaciones, que ciudadanos conscientes de sus propias realidades, su contexto, su vida, y así poder establecer la agenda mediática de cada medio conforme a sus intereses y/o prioridades. Hoy en día tenemos la oportunidad de marcar una agenda con miras a que nuestros problemas sean solucionados en la medida de las posibilidades de cada ciudadano jalisciense… al tiempo. Ojalá prioricemos las agendas que nos perjudican a todos y que es un tema que se habla muy poco de algo perjudicial para México: la corrupción.