jueves , 21 noviembre 2024
Estudiantes de la Universidad de Guadalajara Foto: Chui Medina

Entre Admitidos y rechazados, una reflexión | OPINIÓN

Juan Eduardo López Morales | @EduardoLopezM 31 de julio del 2018

Regularmente una de las funciones del profesor de preparatoria es la de procurar orientar a sus alumnos de cualquier semestre a saber cuales son sus fortalezas, debilidades y áreas de oportunidad para explorar en sus alumnos.

El pasado lunes 23 de julio se repitió la historia de cada ciclo escolar. Los rostros tristes, de enojo, coraje e indignación y muchos otras de frustración de miles de aspirantes a los estudios de licenciatura en la Universidad de Guadalajara que por un punto, varios o simplemente no haberse preparado lo suficiente, no pudieron acceder al siguiente grado escolar.

Ese día, de más 53 mil aspirantes a cursar una carrera, la máxima casa de estudios de Jalisco solamente aceptó el 34 % de admitidos, o sea 18 mil 21 nuevos estudiantes en las diversas licenciaturas e ingenierías y más de 55 mil estudiantes de bachillerato.

Más allá de cifras, de admitidos y rechazados, debemos poner atención en cosas y situaciones que deben ser el foco de atención:

Debemos desde los planteles de preparatoria orientar a los jóvenes a que conozcan otros planes de estudios, otras carreras y no hagan tramites a las “tradicionales carreras saturadas”, que si bien algunos jóvenes, hacen trámites a esas carreras por vocación, hay otros que lo hacen por no quedarse sin estudiar, siendo realmente una opción que no es su pasión y no saben el por qué estudiarán esa disciplina.

Como cada dictamen las carreras más demandadas, fueron 3, con 7 mil 562, 3 mil 162 y 2 mil 302, respectivamente, Medicina, Derecho y Contaduría. Esto demuestra lo que comenté anteriormente los jóvenes no se informan de otras opciones posibles para estudiar.

Al margen de las cifras, debemos de apostar por jóvenes preparados, con una educación que realmente les despierte la vocación y la creatividad, con esos elementos, cualquier disciplina es posible no es morirse de hambre y sacar adelante sus posibilidades para inclusive emprender desde sus propias trincheras sus fuentes de empleo.

Todos aquellos que convivimos con jóvenes bachilleres, tenemos la obligación de orientarlos para saber qué estudiar, yo hago mención en alguna de mis clases que necesitamos profesionistas que tengan pasión, por su trabajo y por no necesitamos, (un ejemplo) enfermeras que en los hospitales te atiendan de mal modo y sin ganas, a dejarnos bien morir, literalmente.

Si eres joven bachiller a punto de egresar, haz una elección, que te agrade a ti, sigue tu pasión y ve por esas metas, que dentro de 4, 5, 6 o más años, México, necesita jóvenes que quieran lo mejor para nuestro país, preparándose para un mejor futuro y para servir mejor al país.

 

Estimado lector, nos vemos, después del 13 de agosto, es necesario un merecido descanso. Saludos y gracias por leer esta columna por Kiosco Informativo.

 

 

Miembro de la Asociación Mexicana de Ciencias Políticas (AMECIP). Con interés en la Comunicación Política y los Medios de Comunicación.
Kiosco Informativo respeta y defiende el derecho a la libre expresión. Las opiniones emitidas en Plaza Pública son unicamente responsabilidad de los columnista

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